Pensar es una actividad ordenada, y eso cuesta un cierto esfuerzo de atención y un cierto ánimo para perseverar. Multitud de obstáculos se interponen … desde la inercia a la hiperexcitación, desde la avidez por el resultado hasta la procrastinación, desde el miedo al vacío al miedo a perder la imagen, pasando por un utilitarismo a ultranza y un sentimentalismo egocentrado.
Te invitamos a la reflexión en un taller con Oscar Brenifier, pionero de la práctica filosófica más transformadora y maestro de pensadores que aprenden a arriesgarse y a disfrutar del ejercicio de pensar.
60 OBSTÁCULOS AL PENSAMIENTO texto de Oscar Brenifier
Cuando hablamos de que necesitamos al otro para conocernos estamos hablando de una experiencia necesaria de distancia para poder pensarse a uno mismo. Una distancia que podría obtenerse mediante la escritura, pero en la que todavía estaría faltando el elemento dinámico de un interlocutor, otro sujeto, que pueda crear preguntas, proponer ideas diferentes, tener una escucha activa y generar un reto.
No está muy extendido querer conocerse a uno mismo, pero menos corriente es que confiemos en los demás para esa tarea. Y sin embargo… tenemos la experiencia de cómo la introspección puede llegar a ahogarse en bucles, en un pensamiento que da vueltas para acabar encontrándose en el mismo sitio. A menudo resolvemos este callejón sin salida hablando con un amigo o familiar, alguien en quien confiamos y ya tiene cierto conocimiento sobre nosotros. Suele ser de gran ayuda si es que no entramos en una segunda trampa: la de esperar que nuestro interlocutor nos dé la razón en todo, incluso que nos adule. Solemos necesitar conocernos mejor en momentos de crisis, justo cuando también necesitamos apoyo afectivo y es frecuente que le demos prioridad al apoyo emocional. Está difícil avanzar en el autoconocimiento…
Sólo si descartamos hacer la tarea de autoconocimiento en momentos especialmente frágiles, si descartamos la idea de que podemos hacerlo solos y si finalmente descartamos que el intercambio con el otro deje de ser un monólogo pesaroso y dolido y pueda ser un diálogo indagador y racional, quizás tengamos alguna oportunidad de llegar a una cierta claridad sobre nosotros mismos.
Nuestro trabajo es eminentemente práctico en todos los niveles de formación:
Para conocernos pídenos un encuentro, te ofrecemos una muestra de nuestro trabajo.
NIVEL INICIACIÓN: Para los que se inician en la práctica y empiezan a ejercitarse en las competencias filosóficas y las actitudes que propician un trabajo filosófico.
NIVEL AVANZADO:Para los que desean profundizar en la práctica filosófica tomando el rol de filósofo práctico en consultas y talleres. Ofrecemos especialización como consultor filosófico o tallerista.
Fotos de Ana Palacios.
La mejor opción es encadenar cursos y especializaciones de forma consecutiva ya que hacemos dos periodos de cursos al año que empiezan en septiembre y enero (además de nuestros cursos cortos en verano para seguir «en forma»). Hemos añadido el NIVEL INTERMEDIO para los que quieren profundizar en las competencias filosóficas y en el autoconocimiento.
Hacemos un seguimiento personalizado durante el curso por parte de un/a tutor/a para cada alumno, ofreciendo retroalimentación individual en las tareas.
Ofrecemos contenidos teóricos al hilo de las prácticas llevadas a cabo. Nuestro trabajo se basa en el descubrimiento de las herramientas de la práctica filosófica en la acción, y la consiguiente reflexión ayudada por textos teóricos.
Nuestros talleres son siempre participativos y animados por los miembros del equipo de Taller de Prácticas Filosóficas. Varios de los talleres del curso serán a cargo de Oscar Brenifier, pionero de nuestro método.
Certificaremos el trabajo realizado y tras la consecución de todos los objetivos, emitiremos certificado de capacitación en las distintas especialidades.